La boda de Aldo y Iliana en Reynosa, Tamaulipas
Al aire libre Verano Negro 1 profesionales
El 13/06/2019 65 0 0
A&I
13 Jun, 2019
La crónica de nuestra boda
Pues no sé por dónde empezar. Dos días antes estuve bastante preocupada por que estuvo lloviendo y la recepción de la boda era al aire libre. Sin embargo, ese día fue soleado, desperté y me arreglé para la boda civil. Decidimos ir a la fiscal y afortunadamente fuimos los primeros en llegar, aunque probablemente no muchos se casan en jueves.
Después me dirigí al salón donde comenzaron a maquillarme y peinarme, junto con mi mamá y mi hija. Al terminar volvimos a casa para colocarnos nuestros respectivos vestidos y yo estaba un poco estresada porque teníamos que ir a la sesión de fotos, porque sí, ese mismo día hicimos todo.
Llegamos a la locación a las 4 de la tarde lo que implicaba que nuestra sesión sería más corta por que la misa era a las 6. Me sentía abrumada, pero traté de calmarme a mí misma y decidí no enojarme. Hicimos la sesión y nuestro fotógrafo nos dio raid a la iglesia, eso porque el camino de entrada estaba super enlodado por la lluvia de los días anteriores y nuestro coche es negro, así que ya se imaginarán. Fue muy gracioso porque al fotógrafo nunca le había tocado ser chófer de novios.
Seguir leyendo »Llegamos a la iglesia y el coche donde se suponía que debía subirme no estaba, no había llegado. Tuve que quedarme en la camioneta del fotógrafo más o menos 30 minutos hasta que por fin llegó el coche y corrí a subirme para que según nadie me viera. Me tomaron algunas fotos y llegó el momento de entrar a la iglesia donde ya estaba el cortejo formado y mi tío, que es como mi papá. Ya estaba yo más tranquila y emocionada, al momento de caminar hacia el altar debía hacerlo despacio, porque me quedaba un poco largo el vestido y lo pisaba, pero bueno, llegue sin caerme. Terminó la misa, dejamos el ramo de ofrenda a la Virgen y después unas pocas fotos. Al salir nos aventaron el tradicional arroz y ahora sí, a disfrutar de la fiesta. Llegamos y bailamos el vals donde, por cierto, nos equivocamos, pero bueno, solo nosotros lo notamos según eso me dijeron. No fue una recepción muy grande y no fue mucha gente, pero creo que estuvieron los que debían. Lo disfrutamos y lo importante es que ahora ya somos marido y mujer y espero que nos dure para toda la vida.
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